PEKÍN (Reuters) – La inflación en las fábricas de China se desaceleró en mayo al verse golpeada la demanda por la debilidad de la industria, lo que agrava la preocupación por el enfriamiento del crecimiento en la segunda economía más grande del mundo, mientras que un aumento de los precios de los alimentos podría acentuar el malestar de los consumidores por el coste de la vida.
La desaceleración fue provocada por la caída de los precios de los productos básicos industriales y estuvo en consonancia con la floja actividad industrial observada en mayo. La evolución se produce en en el contexto de un agravamiento de la disputa comercial de China con Washington, que los analistas temen que pueda desencadenar una recesión mundial.
El índice de precios al productor de China en mayo subió un 0,6% interanual, dijo la Oficina Nacional de Estadísticas (NBS) en un comunicado el miércoles, en línea con las expectativas de los analistas y por debajo de un 0,9% en abril.
En contraste con los precios más bajos de producción, la inflación al consumo se aceleró, impulsada por la subida de los precios de los alimentos, que aumentaron a su ritmo más rápido en siete años, ya que el mal tiempo afectó a la producción de fruta y la peste porcina africana aniquiló la oferta de carne de cerdo.
Sin embargo, aunque los analistas esperan algunos riesgos al alza para el índice principal de precios al consumo en los próximos meses, la mayoría no espera que la inflación minorista limite la capacidad del banco central para suavizar la política monetaria con el fin de apuntalar la desaceleración del crecimiento.
Fuente: https://lta.reuters.com/articulo/china-economia-inflacion-idLTAKCN1TD15K